Las condiciones del clima seco y las altas temperaturas convierten al verano en la época ideal para los incendios. ¡No esperes a que se eleve el termómetro para proteger tu hogar de los posibles daños del fuego!
Disfruta un verano memorable (y libre de desastres), poniendo en práctica las siguientes medidas para reducir el riesgo de incendio dentro y fuera de tu hogar:
- Limpia el techo y las canaletas, removiendo escombros y hojas secas que pudieran haber quedado atrapadas. Estos materiales son el combustible perfecto para propagar un incendio.
- Reemplaza las tejas del techo y mosquiteros metálicos sueltos o rotos para impedir que ingresen cenizas en caso de que ocurra un incendio en el exterior.
- Adquiere muebles para el jardín resistentes al fuego. Si tus muebles actuales no son de este tipo, puedes aplicar un químico especial que aumenta su resistencia contra el fuego.
- No uses un asador cerca de arbustos, árboles o cualquier otro material combustible. Sigue ésta y otras recomendaciones de seguridad al usar asadores.
Aunque lo mejor es prevenir un incendio, también es importante proteger a tu familia y tus finanzas a través de un seguro de casa. Habla con tu agente de seguros hoy mismo y verifica que cuentes con una cobertura adecuada contra